1. Pon en silencio el celular".
Estás en tu primera cita, tu teléfono suena cuatro veces en menos de una hora, tú contestaste con todo gusto cada una de las llamadas. Malas noticias: lejos de pensar que eres súper popular y que el mundo no puede vivir sin tus encantos, tu interlocutora pensará que tienes el perfil de un picaflor, de esos que a la primera oportunidad coquetean con quien se les ponga enfrente.
2. Ni debate, ni terapia
2. Ni debate, ni terapia
Una primera cita no es un buró de quejas ni una mesa de debate filosófico. Si ya desde tu primera cita te la pasas hablando de los retos de la posmodernidad o de cómo tu ex te hizo cachitos el corazón, corres el riesgo de estar poniéndole demasiadas expectativas a la relación.
3. Sin pantallas
A nadie le gusta competir por la atención de los demás, y menos si el rival es la televisión. Prestar más atención a lo que ocurre en la pantalla del bar o del restaurante que a lo que dice la persona que te acompaña no es un gesto muy halagador para una primera cita.
4. Evita jugar al Yo-yo
Los nervios te pueden traicionar y hacer que acapares la conversación en torno a tus propias experiencias. "Yo hice, yo fui, yo tengo un amigo, yo, yo, yo..." Cuando sientas que ocurra, respira profundo y muestra más interés por la persona que tienes enfrente, hazle preguntas, escúchala, obsérvala. Terminarás por aprender más sobre quién es, además de dejarla en suspenso sobre ti.
5. Mírale a los ojos
En el caso de los señores, no me digas: ¿Es una fuerza magnética que arrastra tu mirada hacia su escote y no puedes evitarlo? Por más despistada que sea la mujer con la que salgas, se dará cuenta de tu fragilidad. Quizás sea tiempo de empezar a practicar alguna técnica de autocontrol para que tu mirada no baje más allá del cuello de tu interlocutora.
6. Poderoso caballero...
El amor y el dinero no se pueden ocultar, así que no pierdas el tiempo describiendo lo bien que le han ido a tus acciones en la bolsa de valores o de lo caro que salió tu departamento en la playa. Si quieres que ella se dé cuenta de que eres sólido económicamente hablando, unos zapatos italianos, un reloj clásico y otros detalles discretos en tu arreglo, hablarán por ti.
3. Sin pantallas
A nadie le gusta competir por la atención de los demás, y menos si el rival es la televisión. Prestar más atención a lo que ocurre en la pantalla del bar o del restaurante que a lo que dice la persona que te acompaña no es un gesto muy halagador para una primera cita.
4. Evita jugar al Yo-yo
Los nervios te pueden traicionar y hacer que acapares la conversación en torno a tus propias experiencias. "Yo hice, yo fui, yo tengo un amigo, yo, yo, yo..." Cuando sientas que ocurra, respira profundo y muestra más interés por la persona que tienes enfrente, hazle preguntas, escúchala, obsérvala. Terminarás por aprender más sobre quién es, además de dejarla en suspenso sobre ti.
5. Mírale a los ojos
En el caso de los señores, no me digas: ¿Es una fuerza magnética que arrastra tu mirada hacia su escote y no puedes evitarlo? Por más despistada que sea la mujer con la que salgas, se dará cuenta de tu fragilidad. Quizás sea tiempo de empezar a practicar alguna técnica de autocontrol para que tu mirada no baje más allá del cuello de tu interlocutora.
6. Poderoso caballero...
El amor y el dinero no se pueden ocultar, así que no pierdas el tiempo describiendo lo bien que le han ido a tus acciones en la bolsa de valores o de lo caro que salió tu departamento en la playa. Si quieres que ella se dé cuenta de que eres sólido económicamente hablando, unos zapatos italianos, un reloj clásico y otros detalles discretos en tu arreglo, hablarán por ti.
7. Prohibido "futurear"
Por más que su primer encuentro se desarrolle maravillosamente, incluyendo besos y arrumacos, no hay que precipitarse hacia el futuro juntos. Hacer preguntas como "¿Con quién pasamos navidad, con tu familia o con la mía?" o "¿Cómo se van a llamar nuestros hijos?", pueden asustar a cualquiera.
8. La cuenta, por favor ...
Para los señores: ¿De principio a fin de la cita estuviste quejándote de lo caro que era el lugar? Ella puede pensar: a) No te relajas, no te diviertes. b) eres un tacaño. Desde que alguien propone el lugar, es posible ir calculando cómo va a estar la cuenta. Si ella sugiere algo que tú no estas dispuesto a pagar, estás a tiempo de repensar tu cita. O bien, dale suficientes opciones para que ambos se sientan cómodos con el precio y el tipo de lugar al que irán.
9. La foto del recuerdo
La primera cita no es una buena ocasión para una tomarse una foto juntos con tu celular. Eso da la impresión de que eres un coleccionista de citas. Una conversación sugerente deja un recuerdo mucho más profundo.
Si te fijas bien, estos consejos no sólo son útiles para la primera cita, son pequeños tips para sacarle brillo a cualquier conversación.